Objetivo, reto, lucha. Hacer planes y confiar ciegamente. Cada vez más cabeza. Cada vez más certeza.
Einstein, Isaac Peral, Da Vinci, Jobs. Todos se equivocaban hasta que tuvieron razón. Objetivo, reto, lucha. Confianza.
Si tuviéramos mejores líderes en nuestro entorno no se vería con malos ojos confiar a la lucha diaria la consecución de retos imposibles para conseguir objetivos ambiciosos.
Sin trabas en el horizonte, todo es posible. Error tras error, acierto garantizado. No te rindas.